En silencio, en la presencia de la nada, se encuentra el origen del cosmos en su estado de reposo. Un universo lleno de infinitas frecuencias busca su espacio para expresar su sentido único. Mi mente es un reflejo de este principio sin final, y en ella se halla una nueva interpretación de múltiples interacciones multiculturales que se arraigan y se expanden sin aparente frontera. Es en mi crisis de ausencia donde encuentro mi verdadera presencia. Es mi conciencia en sintonía. Toda una sinfonía.
Entender el complejo sottovoce de mi gente,
las hilarantes conversaciones, las discusiones bizantinas, las conclusiones de
filósofos y académicos, las sesiones del senado, los debates entre presidentes
y reyes, así como los intereses de los inversionistas, puede ser una ambición
para toda una vida. Pero, es mi calma el reflejo de mi alma. Emergente en sí
mismo es como un sismo. Es percibir el fluir consciente en todo ente emergente
de energía. Es estar presente y atento a lo que se siente experimentar a través
de la existencia el devenir constante de múltiples factores aleatorios que sus
realizados comete construyendo la continuidad vivida.
En mi cabeza hablan las voces de
personas que ya no están, que aún habitan la realidad e incluso de supuestas
vidas sin comprobar. Todos en búsqueda de maximizar el bienestar general y
particular. Al final, concordamos que pocos ven la realidad. La inminente
singularidad está acá, desde hace un tiempo ya. La cuenta regresiva inició hace
un tiempo atrás con machine learning, IA y mucho más. La humanidad se
revolucionará, es momento de avanzar. Crecer como especie cuidando
sosteniblemente el hogar para conquistar por ahora el sistema solar.
Agradezco a las voces en mi
cabeza por esta pequeña poesía:
Soy yo
Un resultado probable
Algo asimilable
Un ser razonable
Algo inevitable
Un caminante sin
sendero
Un navegante sin mar
Un pensante
Que no se deja
encerrar
…
UN explorador
espaciotemporal
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