Lo último que le dijo a su Dios fue “que no haya más ruido por favor” y se dejó caer confiada en el apacible sueño.
Al día siguiente despertó en un mundo blanco, lleno de un glorioso vacío, y rió para sí misma (obviamente), porque ya se estaba acostumbrando a las bromas de su Dios. Observó con detenimiento sus manos, sus brazos, su pecho, su sexo, sus piernas, sus pies… todo parecía estar en orden, incluso su larga y ondulada cabellera le acompañaba como un acogedor abrazo, pero cuando quiso tocar su rostro no encontró más que una profundidad gelatinosa y extraña que dejó en sus manos un par de hermosas burbujas de jabón a las que vio con tanta atención que empezaron a salir millares de ellas entre sus dedos.
Esta vez en medio de recuerdos no sonrió. Observó de nuevo el torrente de ligeras burbujas que aparecían infinitas y decidió navegar con ellas, después de todo, si salían de sus manos no podrían hacerle daño. Flotó sutil y liviana pensando en su rostro ausente, en pocos segundos empezaron a surgir bosques inmensos, desiertos infinitos, montañas, valles y toda clase de sorprendentes parajes, a los que veía pasar ante sus ojos.
Pero en ninguno podía ver su rostro perdido y temerosa no quería tocarlo de nuevo, se concentró en sentir esa parte de su cuerpo y cerró sus ojos para ello, pero por más atención que prestaba no encontraba nada; pasó así largo largo tiempo…
Cuando quiso ver de nuevo estaba otra vez dentro del frío vacío inicial, entonces volvió a hacer un repaso concienzudo de cada parte de su cuerpo y ahora era una anciana de aspecto frágil aunque llena de vida, su cabello aún más largo ahora era de un blanco profundo y como las burbujas que tanto había observado reflejaba diversos colores (sonrió porque nunca se lo hubiera imaginado de ese modo pero le encantaba), lo observó detenidamente y descubrió que en él se hallaban partes de cada lugar antes visto: hojas de árboles, partículas de arena, plumas de aves, incluso burbujas diminutas y hermosas…
Pero nuestra princesa aun en medio de esta mágica visión se sintió triste porque comprendió que en cada uno de esos lugares hubiera encontrado una parte de su rostro de haberse tomado el tiempo para adentrarse en sus misterios, pero sólo los había observado detenidamente desde la distancia. Sintiendo toda su tristeza lloró y le dijo a Dios “dame una segunda oportunidad”, porque ella realmente ansiaba verse de nuevo.
Cerró sus ojos y respiró profundamente, está vez la recibió una basta oscuridad, estaba en una cueva extraña, y al tocar su rostro (de nuevo joven) éste le entregaba voces, todo tipo de voces: melodiosas, suaves, siniestras, oscuras… y en todas ellas se reconocía.
No sabemos con exactitud el destino al que llegó nuestra princesa, pero algunos cuentan que le han visto ligera suspendida entre burbujas, obsequiando a los buscadores el reflejo de sus propios rostros.
Fin
Helena
de Paipa, 11 abril 2023
y lo deje nacer, aunque me parezca extraño...
ResponderEliminarEs un hermoso cuento, pude ver claramente a la pequeña Lucía llegar a ver sus cabellos teñirse de gris, sus arrugas plegadas por la experiencia y el mismo brillo curioso de sus ojos almendrados. Gracias por dejar este pedacito de ti.
EliminarMe cautiva esta historia! siento que es el viaje de la heroína, cuando ya un lugar te queda pequeño y pides algo más, y en esa calma y vacío te desconoces para luego traer de vuelta las cosas bellas que surgen del autoconocerse para al final aceptarse y darle al mundo un poquito de ti.
ResponderEliminarEstá escrito bellamente y me llega una imagen muy clara de esta princesa. Mis felicitaciones a la escritora :)
Que hermoso cuento Helenaa
ResponderEliminarTienes mucho talento, me gustó mucho
EliminarCuando me enseñas a hacer cuentos así???
EliminarUn cuento encantador, atrapa, envuelve y en todo momento invitar a seguir el ritmo de la protagonista. Es una historia que vale la pena seguir explorando, hay mucho que descubrir en ella.
ResponderEliminarque bonita historia me dejaste pensando en buscar mi propio reflejo
ResponderEliminarEl estilo simbólico del cuento hace que debas leerlo detenidamente mientras vas asignando tus propios significados a cada elemento. Esto hace que, en la lectura de tu cuento, seamos activos creadores de un cuento propio que nos refleja en alguna medida. Eso me parece espectacular. Felicitaciones!
ResponderEliminarMe gustó mucho el cuento, gracias por compartirlo.
ResponderEliminarMencantaa, esta muy lindo
ResponderEliminarMe confundí un poco en la 5ª y 6ª parte del cuento. Sin embargo, me encantó el desarrollo y su final. Estuvo muy bueno y lo más importante tenía burbujas.
ResponderEliminarte refieres a esos párrafos en particular, o a qué te refieres con partes?
Eliminaraunque si, lo más importante es que tiene burbujas, imposible vivir sin ellas...
EliminarMe parece muy lindo el cuento uvu
ResponderEliminarQue hermoso cuento! Adoro los símbolos e imagarios que logras crear con tu forma de escribir.
ResponderEliminarMe parece un cuento encantador c:
ResponderEliminarMuy buena imaginación, me gusto el trasfondo y el lenguaje, mucho talento
ResponderEliminarEste comentario ha sido eliminado por el autor.
ResponderEliminarMaravilloso viaje por las esferas de la imaginación, donde se aprecian las sensibilidades por la naturaleza, sus manifestaciones y detalles, por las interacciones místicas que se reflejan a cada paso, a cada instante.
ResponderEliminarEste comentario ha sido eliminado por el autor.
ResponderEliminarLo siento... era muy pesimista, pero me gustaría que las personas amarán la masa cambiante de ellos mismos... no hay segundas oportunidades...yyy las perdonas reflejando suluz sobre los más jóvenes para que puedan inventarse a ellos mismos.
ResponderEliminarMe gusta... pero me hace sentir viejo con un rostro claro....
Muy tesa!
ResponderEliminarMuy interesante, siento que se convierte en un cuento De mil historias y posibilidades, cada lector lo transforma de acuerdo a sus necesidades y te lleva a hacer reflexivos sobre muchas cosas.
ResponderEliminarA vivir la vida, el momento es ahora
ResponderEliminarMe suspendió a otro mundo por un momento, que mágico Helena!
ResponderEliminarEntre el surrealismo del cuento y la sencillez del lenguaje, el viaje se hace suave, diáfano e inquietante. Gracias por las palabras
ResponderEliminarLa trascendencia del Ser radica en el NO identificarse con las formas , las creencias ni con cualquier representación. Logrado esto, al humano le cuesta, y asombra, en su proceso personal, aceptar su naturaleza divina manifestada en la disolución de su ego en comunión con la Totalidad. Este cuento, es una profunda y bella interpretación de ello. Gracias
ResponderEliminarY es que para ser tu debes aceptarte por completo, con lo bueno y lo malo, sino no, perderás tu identidad
ResponderEliminarMe encantó! Tienes mucho talento.
ResponderEliminarTe reconocí en cada palabra!!!
ResponderEliminarAmé tu narrativa, el imaginario y lo fantasioso de tu historia, envolvente, entretenida y mística, hermoso cuento Helena 🖤
ResponderEliminarMe encantó, es un cuento hermoso
ResponderEliminar…Y así fue como creó el altruismo como su único medio de identificación...
ResponderEliminarHelena, no dejas de sorprenderme. Qué privilegio encuentro siempre al leerte...
el privilegio es mio Santi
EliminarSigue escribiendo... Me encanta lo abierto de la historia, da para volar la imaginación, volviendo siempre a la propuesta!! Muy bello!!
ResponderEliminar¡Qué cuento tan maravilloso!
ResponderEliminarCreaste una historia llena de sorpresas <3 .
Me encanta cómo la protagonista se sumerge en un mundo de vacío y descubre la belleza y la diversidad en cada parte de su cuerpo.
Me parece que transmite un mensaje poderoso sobre la importancia de explorar y sumergirse en nuestras propias emociones y experiencias para encontrarnos a nosotros mismos.
¡Felicitaciones!
Un cuento muy sublime. Lo disfruté muchísimo
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