Hasta los caminos cortos traen sus desafíos.
Eso pensaba Tomás mientras se dirigía al cumplimiento de una
misión autoimpuesta, abordar una total desconocida.
A unos metros, en una de las bancas del parque, una chica, de
cabello rizado, hacía un video con su celular.
—Hola, soy Tomás, tengo un mensaje para ti, ¿me escuchas un
momento?
Ella lo mira con curiosidad y algo de aquel chico pelirrojo
le genera confianza.
—Si claro, soy
Juanita, intento hacer un video para mis redes sociales, pero estoy un poco sin
ideas sobre que hablar.
Tomas: —¡Noté que estás tomando una cerveza, y bueno, la
marca que escogiste no es de la mejor calidad!
Juanita al principio se encontraba un poco confundida,
pues no esperaba que aquel chico le fuera a hablar de
cervezas, pero una vez, al escuchar con detenimiento cada argumento y
razonamiento, se dejó seducir por el impetuoso relató de Tomás.
Tomás, por su lado, quien siempre aunaba sus estudios en
química con su gran pasión por la cerveza, solo tomaba algunas pocas que
cumplían con el alto estándar que había determinado. Además de ser un
entusiasta activista de ello.
La conversación libre de eufemismos y llena de entusiasmo
solo pudo derivar en una gran pregunta final de parte de Juanita: —¿y dónde
consigo tales brebajes?
Tomás le indica un par de lugares cerca, incluso ofrece
invitar una ronda, con la debida instrucción
¡Acepto! - Indica Juanita sin dudarlo.
—Pero requiero algo a cambio, ayúdame a convertir esta
experiencia en material para mi próximo video.
¡Acepto! - Indica Tomás sin dudarlo.
Lo que se convirtió en una revelación para ambos fue también
en el inicio de una amistad y una pequeña sociedad. Los frutos se vieron más
pronto que tarde, el video fue uno de los más populares y pudieron llevar un
mensaje a miles de personas, y estás a otras tantas más, el fenómeno de
influencia creció considerablemente hasta que se convirtió en un movimiento
nacional. Las personas estaban abriendo su mente a otro tipo de cervezas.
La economía de la industria sintió los efectos del consumo
masivo y a las exigencias del pueblo por más y mejores cervezas, se
fortalecieron las pequeñas cervecerías locales, surgieron muchas otras más y la
indomable industria nacional tuvo que reinventar sus valores corporativos y
adaptarse a lo básico. La industria cervecera, que antes era un monopolio,
ahora se comporta como una propuesta de un país, que apalanca crecimiento de
diferentes sectores económicos como turismo, gastronomía e incluso la
educación. El país emerge como potencia y encuentra en una idea la forma de
cambiar problemas por oportunidades.
Y Juanita y Tomás, quienes con orgullo se sienten
impulsadores de este gran movimiento, hoy siguen en su trabajo como los mejores
amigos, y disfrutando siempre de una buena birra en el mismo parque en el que
se conocieron.
Excelente cuento ya que genera la pasión por la cerveza y que genera alternativa en la economía de un país, revolución contra los mercados del monopolio y abre puertas para los pequeños comerciantes y emprendedores.
ResponderEliminarBuen argumento para demostrar que de una charla casual, se puede generar el conocimiento y apoyo de en este caso de la cerveza
ResponderEliminarQue nota, la cerveza es eso, amigos, sociedades, luchas y desden. Excelente historia.
ResponderEliminarQué buena historia, todo a raíz de una bebida que ha unido generaciones a través de la historia, del emprendimiento, del conocimiento y la experiencia; que más que buscar la perfección en sus diferentes sabores y deleite de quienes la consumen, el mejor resultado es el placer de tomarse una excelente cerveza y por qué no, ser la mejor excusa de interacción y diversión.
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