¿Han
escuchado la canción ‘Have you ever seen the rain’ de Credence Clearwater
Revival? Es mi más grande refugio. ‘Alguien me dijo hace mucho tiempo, que hay
una calma antes de la tormenta… Entonces dicen que cuando se termine, lloverá
en un día soleado…’
Hoy
desperté sintiéndome afligida no estoy el porqué, solo me quedó el sentimiento
de profunda tristeza que socavo los rincones más recónditos de mi memoria y
arremetió contra los intentos de compostura diaria. ¨Uno en la niñez es muy
frágil; guardas lo que vives en lugares que ni sabes que existen y cargas como
lastres las memorias intermitentes que borrosas y difusas salen como fantasmas
durante toda tu vida cada tanto a causar estragos y a entorpecerte.
¨ -¡ahhh¡
¡Voy tarde a la clase!- ¨Esa, quien su reflejo me compaña cuando veo al espejo
muy probablemente soy yo¨.
Tal
aturdimiento bien podría deberse o al efecto de la somnolencia producida por el
trasnocho de la noche anterior o a la mucho peor pesadez emocional de lo
enigmático que habita en mi alma, esta y algunas otras mañanas.
¨Me pesa
el cuerpo y siento un nudo en la garganta ¿Qué hago? Me siento tan sola. ¡No
puedo quedarme aquí! Sería mucho peor, tengo responsabilidades. ¿Por qué no
rindes más? ¿por qué no rindes mejor? ¡Trabaja! ¡Esfuérzate más! Da la talla al
lugar que quizá le estas quitando a alguien mejor que tú ¡Hazlo mejor! ¿qué son
esas notas tan mediocres? ¿qué haces? ¡Qué vergüenza! ¨.
- ¡Señorita por favor el carnet!
- si
claro, ¡mira!
¨Me gusta
ver los pájaros de pico largo en las canchas, están por todos lados, hurgando
sus pequeñas delicias entre la tierra aún húmeda por la llovizna de la
madrugada”.
Voy casi
levitando por el campus, en el tramo que va de la portería de Coca-Cola hasta
el bloque 12 mientras escucho ‘Serenade’ de Schubert, tal vez como ultimo
clamor a un espíritu que me es tan esquivo, el de la quietud. Bailan a mi paso
las palmeras, las ceibas y los árboles; zarandeándose por el aire siempre tan
puro que baja de volador y que resulta tan contrastante con el siempre rancio
que viene del otro lado, del lado de las fábricas; reverberan los verdes con
los lánguidos destellos de luz apenas saliente. ¨Algo en este lugar eleva mi
espíritu¨. ¨Ahí está Suli¨.
-Hola Suli
¿cómo estás?
-Bien,
hace rato te venía saludando y vos toda muerta, ¡Achichay! ¿en qué pensabas?
-No sé, ya
no me acuerdo, creo que andaba en otro mundo; y ¡sí! Que frio, pero mira que
está saliendo el sol; Me alegra mucho verte, enserio (‘Silence’ Beethoven)
Un hermoso relato, es como un reflejo de tantas emociones que nos abordan en la cotidianidad, de pensamientos que nos bombardean la mente, pero contado desde una dulzura y sensibilidad que permite abordar incluso la belleza de lo que nos rodea. Me gustó mucho. Felicitaciones!!
ResponderEliminarBuenisimo
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